Anàlisis

sábado, 28 de febrero de 2015

28/02/2015 - Todo se sabe

Nuestro Pan Diario
28/02/2015
Todo se sabe
Mientras callé, se envejecieron mis huesos en mi gemir todo el día. —Salmo 32:3
Lectura: Salmo 32:1-5
La biblia en un año: Números 20–22Marcos 7:1-13

Un pastor contó esta historia sobre él en un periódico local. Estaba charlando con un hombre mayor a quien acababan de presentarle. Entonces, dijo: «Así que usted trabajaba en una empresa de servicios», y mencionó el nombre de la compañía. «Exacto», respondió el hombre. El pastor señaló que, cuando era chico, los cables de esa empresa pasaban por la propiedad de sus padres. «¿Dónde vivía?», preguntó el hombre. Cuando el pastor le dijo, el anciano respondió: «Recuerdo esa propiedad. Me costó muchísimo mantener colocados en su lugar los carteles de advertencia de los cables. Los niños los sacaban siempre». Cuando la cara del pastor se puso roja de vergüenza, el hombre preguntó: «Usted era uno de ellos, ¿verdad?». Y no se había equivocado.

El pastor tituló la historia de su confesión: Sepan que sus «carteles» los alcanzarán; un inteligente juego de palabras con la frase de Moisés en Números 32:23: «sabed que vuestro pecado os alcanzará».

Los errores del pasado nos alcanzan de alguna manera, y los pecados antiguos que no hemos resuelto pueden generar consecuencias graves. Como se lamenta David en el Salmo 32: «Mientras callé, se envejecieron mis huesos». Sin embargo, confesar nuestros errores restaura la comunión con el Señor: «Mi pecado te declaré, […] y tú perdonaste la maldad de mi pecado» (v. 5). Mediante la confesión, podemos disfrutar del perdón divino.
— DB

              Los cristianos pueden borrar de su memoria lo que Dios ha borrado del registro.

viernes, 27 de febrero de 2015

27/02/2015 - Una vida coherente

Nuestro Pan Diario
27/02/2015
Una vida coherente
… [Daniel] se arrodillaba […], y oraba y daba gracias delante de su Dios, como lo solía hacer antes. —Daniel 6:10
Lectura: Daniel 6:1-10
La biblia en un año: Números 17–19Marcos 6:30-56

Mientras estudiaba el libro de Daniel, me llamó la atención la facilidad con que él podría haber evitado que los arrojaran al foso de los leones. Los celosos rivales de Daniel, que trabajaban para el gobierno de Babilonia, le tendieron una trampa relacionada con su costumbre de orar diariamente a Dios (Daniel 6:1-9). Daniel era plenamente consciente del complot, y podría haber decidido orar en forma privada durante un mes, hasta que todo se tranquilizara. Pero él no era esa clase de persona.

«Cuando Daniel supo que el edicto había sido firmado, entró en su casa, y abiertas las ventanas de su cámara que daban hacia Jerusalén, se arrodillaba tres veces al día, y oraba y daba gracias delante de su Dios, como lo solía hacer antes» (v. 10). Daniel no tuvo miedo ni negoció con el Señor, sino que continuó «como acostumbraba hacerlo» (v. 10 rvc). La presión de la persecución no lo intimidó.

Aprendí que el poder de la vida de Daniel estaba en su constante devoción al Señor. Su fortaleza venía de Dios, a quien Daniel quería agradar todos los días. Cuando surgía una crisis, no necesitaba cambiar su práctica diaria para superarla, sino que, simplemente, seguía comprometido con su Señor.
— DCM

              Dios nos da el poder para defender su causa cuando nos arrodillamos a orar.

jueves, 26 de febrero de 2015

26/02/2015 - Cambio de perspectiva

Nuestro Pan Diario
26/02/2015
Cambio de perspectiva
Mientras Pablo los esperaba en Atenas, su espíritu se enardecía viendo la ciudad entregada a la idolatría. —Hechos 17:16
La biblia en un año: Números 15–16Marcos 6:1-29

Mi esposa es madrugadora; le encanta la tranquilidad que hay antes de empezar las actividades en la casa, y usa ese momento para leer la Biblia y orar. Hace poco, se instaló en su silla favorita, pero se encontró con un sillón bastante desordenado que «alguien» había dejado así la noche anterior, tras mirar un partido de fútbol por televisión. Al principio, el desorden la distrajo, y su frustración conmigo le interrumpió la calidez del momento.

Entonces, se le ocurrió algo: se cambió al sofá. Desde allí, podía mirar por la ventana mientras el sol se levantaba sobre el Océano Atlántico. La belleza de la escena que Dios estaba pintando esa mañana le cambió la perspectiva.

Mientras me contaba la historia, ambos reconocimos la lección de aquella mañana. Aunque no siempre podemos controlar las cosas de la vida que afectan nuestro día, sí tenemos la posibilidad de elegir: o seguir dando vueltas en el «desorden» o cambiar de perspectiva. Cuando Pablo estaba en Atenas, «su espíritu se enardecía viendo la ciudad entregada a la idolatría» (Hechos 17:16). Sin embargo, cuando cambió su perspectiva, usó el interés de los atenienses en la religión como una oportunidad para proclamar al Dios verdadero: Jesucristo (vv. 22-23).

Cuando mi esposa salió para ir a trabajar, fue el momento para que otra persona cambiara de perspectiva: le pedí al Señor que me ayudara a ver mi desorden a través de los ojos de ella y de los de Él.
— RK


          La sabiduría es ver las cosas desde la perspectiva de Dios.

miércoles, 25 de febrero de 2015

25/02/2015 - Su elección

Nuestro Pan Diario
25/02/2015
Su elección
… Dios os [ha] escogido desde el principio para salvación… —2 Tesalonicenses 2:13
La biblia en un año: Números 12–14Marcos 5:21-43

Cuando nuestros hijos eran pequeños, solía orar con ellos cuando los acostábamos. Pero, antes de orar, a veces me sentaba al borde de la cama y charlábamos. Recuerdo decirle a nuestra hija: «Si pudiera poner en fila a todas las niñas de cuatro años que hay en el mundo, te buscaría a ti. Recorrería toda la fila y te elegiría para que fueras mi hija». Eso siempre le ponía una sonrisa en el rostro, porque sabía que ella era especial.

Si esa situación era un motivo para que mi hija sonriera, piensa en lo que significa que, en su gracia, el Dios creador del universo te haya «escogido desde el principio para salvación» (2 Tesalonicenses 2:13). En la eternidad pasada, ya deseaba hacerte su hijo. Por esta razón, las Escrituras suelen usar el tema de la adopción para comunicar la realidad asombrosa de que, sin mérito de nuestra parte, el Señor nos eligió.

¡Qué noticia tan maravillosa! Somos «amados por el Señor» (v. 13) y disfrutamos de los beneficios de ser parte de su familia. Esta gloriosa verdad debe llenarnos de humildad y gratitud. «Y el mismo Jesucristo Señor nuestro, y Dios nuestro Padre, el cual nos amó […] os confirme en toda buena palabra y obra» (vv. 16-17).
— JS

           Dios decidió amarte, transformarte y hacerte parte de su familia. 

martes, 24 de febrero de 2015

24/02/2015 - Anhelar ser rescatado

Nuestro Pan Diario
24/02/2015
Anhelar ser rescatado
Y dará a luz un hijo, y llamarás su nombre JESÚS, porque él salvará a su pueblo de sus pecados. —Mateo 1:21
Lectura: Mateo 1:18-25
La biblia en un año: Números 9–11Marcos 5:1-20

La película El hombre de acero, estrenada en 2013, es una versión actualizada de la historia de Superman. Repleta de efectos especiales asombrosos y de acción ininterrumpida, atrae multitudes a los cines en todo el mundo. Algunos dijeron que tanta atracción se debía a su espectacular tecnología. Otros la atribuyeron a la «mitología del supermán».

Amy Adams, la actriz que representa en la película el papel de Luisa Lane, tiene una perspectiva diferente del atractivo de la historia y dice que tiene que ver con un anhelo básico de la condición humana: «¿Quién no quiere creer que hay una persona que puede venir a salvarnos de nuestra propia maldad?».

Es una gran pregunta. Y la respuesta es que ciertamente hubo alguien que ya vino para salvarnos de nuestra propia maldad; esa persona es Jesús. Se hicieron varios anuncios sobre su nacimiento. Uno de ellos se lo hizo el ángel Gabriel a José: «Y [María] dará a luz un hijo, y llamarás su nombre JESÚS, porque él salvará a su pueblo de sus pecados» (Mateo 1:21).

Jesús vino, y lo hizo para salvarnos de nuestros pecados y de nuestra propia maldad. Su nombre significa «el Señor salva», y su misión fue nuestra salvación. El anhelo de ser rescatado que inunda el corazón humano encuentra total satisfacción en Cristo.
— BC

           El nombre y la misión de Jesús son lo mismo: Él vino para salvarnos.

lunes, 23 de febrero de 2015

23/02/2015 - El mundo invisible

Nuestro Pan Diario
23/02/2015
El mundo invisible
… el ángel del Señor estaba en el camino… —Números 22:23 rvc
La biblia en un año: Números 7–8Marcos 4:21-41

¿Sabías que los microbios que tienes en una mano superan la cantidad de personas que habitan la Tierra? ¿O que millones de ellos pueden encontrarse en el ojo de una aguja? Estos organismos vivientes unicelulares son demasiado pequeños para verlos sin un microscopio; aun así, viven en el aire, la tierra, el agua e, incluso, nuestro cuerpo. Interactuamos constantemente con ellos, aunque su mundo está completamente fuera de nuestra percepción.

Las realidades del mundo espiritual también suelen ser invisibles para los seres humanos, tal como lo descubrió el profeta Balaam. Mientras viajaba por el camino junto con sus dos siervos, su asna «vio que el ángel del Señor estaba en el camino, y que en la mano tenía desenvainada la espada» (Números 22:23 rvc). Para no toparse con el ángel, el animal se desvió hacia un campo, aplastó el pie de Balaam contra una pared y se echó con el profeta aún sobre su lomo. Balaam se enojó y azotó el asna. No se dio cuenta de que estaba ocurriendo algo sobrenatural… hasta que Dios le abrió los ojos (v. 31).

La Biblia nos enseña que existe un mundo espiritual, y es posible que, a veces, nos encontremos con realidades de esa esfera, tanto buenas como malas (Hebreos 13:2; Efesios 6:12). Por esta razón, se nos exhorta a estar alertas, preparados y en oración. Tal como Dios gobierna el mundo que vemos, también lo hace en el invisible.
— JBS

             Todo lo visible y lo invisible está bajo el poder soberano de Dios.

domingo, 22 de febrero de 2015

22/02/2015 - Pregúntale al autor

Nuestro Pan Diario
22/02/2015
Pregúntale al autor
… nosotros tenemos la mente de Cristo. —1 Corintios 2:16
La biblia en un año: Números 4–6Marcos 4:1-20

Por años, he formado parte de diversos grupos de lectores. Por lo general, varios amigos leen un libro y, después, se reúnen para comentar las ideas expuestas por el autor. Casi siempre, alguien formula una pregunta que nadie puede contestar. Entonces, otro dirá: «Si tan solo pudiéramos preguntarle al autor». Una tendencia popular en diversas ciudades es hacer esto posible: algunos autores, por una tarifa mínima, se ponen a disposición para encontrarse con los miembros del club.

¡Qué diferente es esto para los que nos reunimos a estudiar la Biblia! Jesús se reúne con nosotros siempre: sin cobrar una tarifa, sin conflicto de horarios, sin viáticos. Además, tenemos el Espíritu Santo que nos guía para que entendamos. Una de las últimas promesas de Jesús a sus discípulos fue que Dios enviaría el Espíritu Santo para enseñarles (Juan 14:26).

El Autor de la Biblia no está limitado al tiempo ni al espacio; puede reunirse con nosotros en cualquier momento y lugar. Por eso, cuando tenemos una duda, podemos preguntarle, con la certeza de que nos contestará… aunque tal vez no sea según nuestro cronograma.

Dios quiere que tengamos la mente del Autor (1 Corintios 2:16), para que, mediante la enseñanza del Espíritu, comprendamos la grandeza del regalo que gratuitamente nos ha dado (v. 12).
— JAL

         Cuando abras tu Biblia, pídele al Autor que abra tu mente y tu corazón.

sábado, 21 de febrero de 2015

21/02/2015 - Acercarse a Dios

Nuestro Pan Diario
21/02/2015
Acercarse a Dios
… Santo, santo, santo, el Señor de los ejércitos; toda la tierra está llena de su gloria. —Isaías 6:3
Lectura: Isaías 6:1-8
La biblia en un año: Números 1–3Marcos 3

Algo que anteriormente solía molestarme era que, cuanto más me acercaba a Dios, más pecador me sentía. Al tiempo, un fenómeno que observé en mi habitación me hizo recapacitar: una pequeña abertura en la cortina de la ventana dejaba pasar un rayo de luz. Al mirar, vi partículas de polvo que volaban en el reflejo. Sin ese rayo, el cuarto parecía limpio, pero la luz revelaba las partículas de suciedad.

Ese hecho arrojó luz sobre mi vida espiritual. Cuanto más me acerco al Señor de la luz, con más claridad me veo. Cuando la luz de Cristo ilumina la oscuridad de nuestra vida, expone el pecado; pero no lo hace para desanimarnos, sino para que confiemos humildemente en Él. No podemos depender de nuestra propia justicia, porque somos pecadores y no alcanzamos los estándares de Dios (Romanos 3:23). Cuando somos orgullosos, la luz revela nuestro corazón, y clamamos como Isaías: «¡Ay de mí! […]; porque siendo hombre inmundo de labios, […] han visto mis ojos al Rey, Jehová de los ejércitos» (Isaías 6:5).

Dios es absolutamente perfecto en todo. Para acercarse a Él, es necesario tener humildad y confianza como la de un niño, y dejar de lado la jactancia y el orgullo. Es por su gracia que nos atrae hacia Él. Es bueno sentirnos indignos cuando nos acercamos a Dios, porque esto nos enseña a ser humildes y nos hace depender solamente de Él.
— LD

          No hay lugar para el orgullo cuando caminamos con Dios.

viernes, 20 de febrero de 2015

20/02/2015 - Muy cargado

Nuestro Pan Diario
20/02/2015
Muy cargado
… despojémonos de todo peso y del pecado que nos asedia, y corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante. —Hebreos 12:1
La biblia en un año: Levítico 26–27Marcos 2

El 10 de agosto de 1628 fue una fecha oscura para la historia naval. Ese día, la corbeta real Vasa zarpó en su viaje inaugural. Después de dos años de construcción, lujosamente adornado y con 64 cañones, el orgullo de la flota naval sueca se hundió a un kilómetro y medio de la costa. ¿Qué falló? La carga era demasiado pesada como para que pudiera navegar. El exceso de peso llevó al Vasa al fondo del mar.

La vida cristiana también puede hundirse por exceso de equipaje. Para animarnos en nuestro andar espiritual, Hebreos señala: «despojémonos de todo peso y del pecado que nos asedia, y corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante, puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe» (Hebreos 12:1-2).

Como el barco lujosamente decorado, podemos impresionar exteriormente a los demás, pero, si el pecado nos agobia en lo interior, nuestra perseverancia puede verse afectada. No obstante, hay un remedio: al descansar en la guía de Dios y el poder del Espíritu Santo, nuestra carga puede aliviarse y la perseverancia fortalecerse.

El perdón y la gracia están siempre a disposición del peregrino espiritual.
— DF

          Perseverar se trata de lo que no hacemos como de lo que sí llevamos a cabo.

jueves, 19 de febrero de 2015

19/02/2015 - ¿La voluntad de quién?

Nuestro Pan Diario
19/02/2015
¿La voluntad de quién?
… Padre mío, si es posible, pase de mí esta copa; pero no sea como yo quiero, sino como tú. —Mateo 26:39
La biblia en un año: Levítico 25Marcos 1:23-45

«Que todo ocurra según tu voluntad» es un saludo frecuente durante el año nuevo chino. Por más maravilloso que suene, las cosas salen mejor cuando se aplica la voluntad de Dios y no la nuestra.

Si hubiese podido elegir, José no habría querido ser esclavo en Egipto (Génesis 39:1). Sin embargo, a pesar de su cautiverio, fue «próspero» porque «el Señor estaba con José» (v. 2). Dios incluso bendijo la casa de su amo «a causa de [él]» (v. 5).

Tampoco hubiese querido ir preso, pero así sucedió cuando lo acusaron falsamente de acoso sexual. No obstante, leemos por segunda vez: «el Señor estaba con José» (v. 21). Allí se ganó la confianza del guardia (v. 22), ya que «lo que él hacía, el Señor lo prosperaba» (v. 23). Su espiral descendente hacia la cárcel se convirtió en el comienzo de su ascenso a la posición más elevada en Egipto. Pocas personas escogerían ser ascendidas del modo que el Señor lo hizo con José. Pero Dios bendice a pesar de las circunstancias adversas e, incluso, a través de ellas.

El Señor tenía un propósito al llevar a José a Egipto, y también lo tiene al colocarnos en el lugar donde estamos. En vez de desear que todas las cosas sucedan según nuestra voluntad, podríamos decir, como lo hizo nuestro Salvador antes de ir a la cruz: «no sea como yo quiero, sino como tú» (Mateo 26:39).
— CPH

              A menudo, esperar con paciencia es la mejor manera de hacer la voluntad de Dios.

miércoles, 18 de febrero de 2015

Campaña 28 A la Vez

¡Buenas tardes 😊 y bendiciones para todos! 🙌

Echa un vistazo a este vídeo en YouTube:
28 A la Vez
http://youtu.be/GsUz1tc54vo

18/02/2015 - Espejito, espejito

Nuestro Pan Diario
18/02/2015
Espejito, espejito
… el […] hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace. —Santiago 1:25
La biblia en un año: Levítico 23–24Marcos 1:1-22

¿Cuántas veces te miras al espejo? Un estudio señala que la persona promedio se mira entre 8 y 10 veces por día. Otras encuestas indican que el número podría llegar hasta 60 o 70 veces, si se incluye mirar nuestro reflejo en la vidriera de las tiendas y en las pantallas de los teléfonos móviles.

¿Por qué nos miramos tanto? La mayoría de los expertos coincide en que es para verificar nuestro aspecto; en especial, antes de reuniones o actividades sociales. Si algo está mal, queremos arreglarlo. ¿Qué sentido tiene mirarse si no planeamos cambiar lo que está mal?

El apóstol Santiago afirmó que leer u oír la Palabra de Dios sin ponerla en práctica es como mirarse en un espejo y olvidarse de lo que uno vio (1:22-24). No obstante, la mejor alternativa es mirar detenidamente y actuar según lo que vemos. Santiago declaró: «Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace» (v. 25).

Si oímos la Palabra de Dios y no hacemos nada, nos engañamos a nosotros mismos (v. 22). Pero, cuando nos examinamos a la luz de las Escrituras y obedecemos sus instrucciones, el Señor nos libera de todo lo que nos impide parecernos cada día más a Él.
— DCM

              La Biblia es un espejo que nos permite vernos como Dios nos ve.

martes, 17 de febrero de 2015

17/02/2015 - Construir un puente

Nuestro Pan Diario
17/02/2015
Construir un puente
… en todo lugar vuestra fe en Dios se ha extendido... —1 Tesalonicenses 1:8
La biblia en un año: Levítico 21–22Mateo 28

El libro Centenario, de James Michener, es una ficción sobre la historia y la conquista del oeste norteamericano. A través de los ojos de un comerciante franco-canadiense llamado Pasquinel, el autor entrecruza las historias de los indígenas arapajó de las Grandes Planicies y la comunidad europea de Saint Louis. Mientras este tosco aventurero se mueve entre el creciente desorden de la ciudad y las grandes llanuras, se convierte en un puente entre dos mundos drásticamente diferentes.

Los seguidores de Cristo también tienen la oportunidad de construir puentes entre dos mundos muy distintos: los que conocen y siguen a Jesús y los que no lo conocen. Los primeros cristianos en Tesalónica habían estado construyendo puentes en la cultura idólatra que los rodeaba; por eso, Pablo dijo de ellos: «Porque partiendo de vosotros ha sido divulgada la palabra del Señor, no sólo en Macedonia y Acaya, sino […] también en todo lugar…» (1 Tesalonicenses 1:8). El puente que estaban edificando tenía dos componentes: «la palabra del Señor» y el ejemplo de la fe de ellos. Todos veían que estos creyentes se habían convertido «de los ídolos a Dios, para servir al Dios vivo y verdadero» (v. 9).

A medida que Dios se manifieste a los que nos rodean mediante su Palabra y a través de nuestra vida, podemos convertirnos en puentes para aquellos que todavía no conocen el amor de Cristo.
— BC

                Vive el evangelio y los demás escucharán.

lunes, 16 de febrero de 2015

16/02/2015 - Domar lo indomable

Nuestro Pan Diario
16/02/2015
Domar lo indomable
… ningún hombre puede domar la lengua… —Santiago 3:8
La biblia en un año: Levítico 19–20Mateo 27:51-66

Desde cerdos vietnamitas hasta zorros siberianos, los humanos han aprendido a domar animales salvajes. A la gente le encanta enseñarles a los monos a «actuar» en publicidades o entrenar ciervos para que coman de sus manos. Como señala el apóstol Santiago: «toda naturaleza de bestias, y de aves, y de serpientes, y de seres del mar, se doma y ha sido domada por la naturaleza humana» (3:7).

Pero hay algo que no podemos domar: todos tenemos problema para controlar una cosita llamada lengua. «… ningún hombre puede domar la lengua», afirma Santiago (v. 8).

¿Por qué? Porque, aunque nuestras palabras estén en la punta de la lengua, se originan en lo profundo de nuestro ser: «Porque de la abundancia del corazón habla la boca» (Mateo 12:34). Entonces, la lengua puede usarse para bien y para mal (Santiago 3:9). El erudito Peter Davids lo expresa así: «Por un lado, [la lengua] es muy religiosa, pero, por el otro, puede ser sumamente profana».

Si no podemos domar esta lengua desenfrenada que tenemos, ¿está destinada a ser un problema diario en nuestra vida, siempre inclinada a decir cosas malas? (v. 10). Por la gracia de Dios, no. Aunque nuestros métodos fracasen, el Señor pondrá «guarda a mi boca» y a «la puerta de mis labios» (Salmo 141:3). Él puede domar lo indomable.
— DB

           Para dominar la lengua, deja que Cristo gobierne tu corazón.

domingo, 15 de febrero de 2015

15/02/2015 - Tráiganme al muchacho

Nuestro Pan Diario
15/02/2015
Tráiganme al muchacho
… respondió Jesús […:] Tráiganme al muchacho. —Marcos 9:19 nvi
La biblia en un año: Levítico 17–18Mateo 27:27-50

«No creo en Dios y no voy a ir», dijo Marcos.

A Ana se le hizo un nudo en la garganta. Su hijo se había convertido de un muchacho alegre en un joven malhumorado y desaprensivo. La vida era un campo de batalla, y el domingo se había vuelto un día incómodo, ya que Marcos no quería ir a la iglesia con su familia. Finalmente, sus padres, desesperados, consultaron a un consejero, el cual dijo: «Marcos tiene que experimentar la fe personalmente. No pueden forzarlo a creer en Cristo. Dejen que Dios obre. Sigan orando y esperando».

Ana esperó… y oró. Una mañana, las palabras de Jesús resonaron en su mente. Los discípulos del Señor no habían podido ayudar a un joven endemoniado, pero Jesús tuvo la respuesta: «Tráiganme al muchacho» (Marcos 9:19). El sol brillaba por la ventana, al costado de Ana, y se reflejaba en el piso. Si Jesús pudo ayudar en una situación tan extrema como aquella, podía sin duda ayudar a su hijo. Imaginó estar de pie con su hijo y Jesús bajo aquella luz. Entonces, mentalmente, dio un paso atrás y dejó a su hijo solo con Aquel que lo amaba aun más que ella.

Todos los días, Ana entregaba silenciosamente a Marcos al Señor, aferrándose a la certeza de que Él conocía las necesidades del muchacho y que, a su tiempo y manera, obraría en su vida.
— MS

             La oración es la voz de la fe, que confía en que Dios sabe y se interesa por nosotros.

sábado, 14 de febrero de 2015

14/02/2015 - Cuestión de amor

Nuestro Pan Diario
14/02/2015
Cuestión de amor
Y amarás al Señor tu Dios de todo tu corazón, y de toda tu alma, y con todas tus fuerzas. —Deuteronomio 6:5
La biblia en un año: Levítico 15–16Mateo 27:1-26

«Cuando el intelecto y las emociones chocan, el corazón suele ser el más sabio», escribieron los autores de Una teoría general del amor. También señalan que, en el pasado, la gente creía que la mente debía gobernar el corazón, pero que ahora, la ciencia ha descubierto que la verdad es lo opuesto: «Lo que somos y en lo que nos convertimos depende, en parte, del objeto de nuestro amor».

Las personas que conocen las Escrituras saben que esta es una antigua verdad y no un descubrimiento reciente. El mandamiento más importante que Dios le dio a su pueblo le otorga al corazón un lugar destacado: «Y amarás al Señor tu Dios de todo tu corazón, y de toda tu alma, y con todas tus fuerzas» (Deuteronomio 6:5). Solo a partir de los Evangelios de Marcos y de Lucas, vemos que Jesús agregó la palabra mente (Marcos 12:30; Lucas 10:27). Así que, lo que los científicos están descubriendo ahora, la Biblia ya lo enseñaba hace mucho

Los que seguimos a Cristo también comprendemos la importancia de quién es el objeto de nuestro amor. Cuando obedecemos el mandamiento más importante y convertimos a Dios en ese objeto, podemos estar seguros de que tenemos un propósito que trasciende todo lo que podamos imaginar o lograr con nuestro esfuerzo. Si deseamos que el Señor gobierne nuestro corazón, nuestra mente se mantendrá enfocada en cómo servirlo, y nuestras acciones impulsarán su reino en la Tierra y el cielo.
— JAL

             «Cuenta como perdido cada día que no hayas utilizado para amar a Dios». —Hermano Lorenzo

viernes, 13 de febrero de 2015

13/02/2015 - La Palabra entre nosotros

Nuestro Pan Diario
13/02/2015
La Palabra entre nosotros
Pues tus testimonios son mis delicias y mis consejeros. —Salmo 119:24
La biblia en un año: Levítico 14Mateo 26:51-75

La Palabra de Dios nos llega de muchas maneras. Las predicaciones bíblicas, la lectura, las canciones, los grupos de estudio y los artículos devocionales nos presentan las verdades del Señor contenidas en las Escrituras. Sin embargo, no podemos pasar por alto la lectura y el estudio personal.

Hace poco, mi corazón se conmovió con un estudio minucioso y párrafo por párrafo de Deuteronomio en paralelo con el Sermón del monte, en Mateo 5–7. Ambos pasajes contienen códigos de fe: los Diez Mandamientos (Deuteronomio 5:6-21) y las Bienaventuranzas (Mateo 5:3-12). Deuteronomio nos muestra el antiguo pacto: la ley que Dios quería que siguiera su pueblo. En Mateo, Jesús nos muestra cómo vino Él a cumplir esa ley y establecer los principios del nuevo pacto, el cual nos libera del peso de la ley.

El Espíritu Santo viene con la Palabra de Dios para enseñarnos, darnos poder, instruirnos, convencernos y purificarnos. El resultado es entendimiento, arrepentimiento, renovación y crecimiento en Cristo. El teólogo Philip Jacob Spener escribió: «Cuanto más a gusto estemos con la Palabra de Dios, tendremos más fe y más de sus frutos». Oremos con el salmista: «Abre mis ojos, y miraré las maravillas de tu ley» (Salmo 119:18), para que podamos poner estas cosas en práctica en nuestra vida.
— DCE

                Cuando la Palabra de Dios está en nuestro interior, fluye de nuestra vida.

jueves, 12 de febrero de 2015

12/02/2017 - Vida bien regada

Nuestro Pan Diario
12/02/2017
Vida bien regada
… será como el árbol plantado junto a las aguas, […] su hoja estará verde… —Jeremías 17:8
La biblia en un año: Levítico 13Mateo 26

Tengo un amigo que vive en una finca ganadera en las amplias llanuras de Montana, en Estados Unidos. El camino hasta su casa es un sendero largo a través del terreno seco y árido del desierto, pero se destaca del resto por la hilera de árboles verdes y la vegetación frondosa que lo circunda. Uno de los ríos más hermosos para pescar truchas atraviesa la propiedad, y todo lo que crece cerca de sus orillas experimenta los beneficios de una fuente inagotable de agua revitalizadora.

Este es el cuadro que pinta Jeremías cuando afirma que aquellos que confían en el Señor son «como el árbol plantado junto a las aguas, que junto a la corriente echará sus raíces» (Jeremías 17:8). Tal vez hay muchos que prefieren el calor abrasador y la sequía asfixiante de una vida lejos de Dios, pero los que confían en el Señor serán vibrantes y fructíferos. Depender de Él es como poner nuestras raíces en el agua refrescante de su bondad. Nos fortalece la confianza en que su amor inalterable hacia nosotros nunca fallará.

Al final, Dios arreglará todas las cosas. Confiar en que Él convertirá nuestra tristeza en un beneficio y que utilizará el sufrimiento para que maduremos nos da poder para llevar fruto en una tierra seca y sedienta.
— JS

              Echa raíces junto al río de la bondad de Dios.

miércoles, 11 de febrero de 2015

11/02/2015 - Volver de la muerte

Nuestro Pan Diario
11/02/2015
Volver de la muerte
Aun estando nosotros muertos […], [Dios] nos dio vida juntamente con Cristo… —Efesios 2:5PLectura: Efesios 2:1-10
La biblia en un año: Levítico 11–12Mateo 26:1-25

¿Puede una persona estar oficialmente viva después de ser declarada legalmente muerta? Esta pregunta se convirtió en una noticia internacional cuando un hombre apareció 25 años después de haber sido declarado desaparecido. En aquel momento, no tenía trabajo, era adicto a las drogas y había dejado de pagar la cuota alimentaria para sus hijos. Por eso, decidió desaparecer. No obstante, al reaparecer, descubrió cuán difícil es volver de la muerte. Cuando fue a los tribunales para revertir el fallo que lo declaraba legalmente muerto, el juez rechazó su pedido, ya que se requería un período de tres años para modificar la medida.

Ese pedido inusual a un tribunal humano es una experiencia habitual para Dios. En su carta a los efesios, Pablo señala que, aunque estábamos espiritualmente muertos, Dios «nos dio vida juntamente con Cristo» (Efesios 2:1, 5). No obstante, declararnos y hacernos espiritualmente vivos fue una cuestión sumamente dolorosa para Dios, ya que nuestro pecado y su consecuente muerte espiritual exigieron el sufrimiento, la muerte y la resurrección de su Hijo (vv. 4-7).

Una cosa es probar que estamos físicamente vivos, pero nuestro desafío es demostrar vida espiritual. Al ser declarados vivos en Cristo, se nos llama a vivir agradecidos por la inconmensurable misericordia y la vida que hemos recibido.
— MDH

               Jesús murió para que nosotros pudiéramos vivir.

martes, 10 de febrero de 2015

10/02/2015 - El visitante

Nuestro Pan Diario
10/02/2015
El visitante
Estuve desnudo, y me cubristeis; enfermo, y me visitasteis; en la cárcel, y vinisteis a mí. —Mateo 25:36
La biblia en un año: Levítico 8–10Mateo 25:31-46

Un amigo mío le preguntó a un hombre recién jubilado qué iba a hacer ahora que ya no trabajaba todo el tiempo. «Me considero un visitante —respondió el hombre—. Voy a ver a integrantes de nuestra iglesia y comunidad que están en el hospital o en centros de cuidados especiales, que viven solos o que, simplemente, necesitan alguien que hable y ore con ellos. ¡Y me encanta hacerlo!». Mi amigo quedó impresionado ante la claridad de propósito de este hombre y su interés en los demás.

Unos días antes de que Jesús fuera crucificado, contó a sus seguidores una historia que enfatizaba la importancia de visitar a los necesitados. «Entonces el Rey dirá a los de su derecha: […] estuve desnudo, y me cubristeis; enfermo, y me visitasteis; en la cárcel, y vinisteis a mí» (Mateo 25:34, 36). Cuando le preguntaran: «¿… cuándo te vimos enfermo, o en la cárcel, y vinimos a ti?», el Rey responderá: «De cierto os digo que en cuanto lo hicisteis a uno de estos mis hermanos más pequeños, a mí lo hicisteis» (vv. 39-40).

Nuestro ministerio de visitación tiene dos beneficiarios: la persona visitada y Jesús mismo. Ir a ver a una persona para ayudarla y alentarla es servir al Señor directamente.

¿Hay alguien a quien lo alentaría que lo visitaras hoy?
— DCM

          Compasión es entender los problemas de los demás y tener un deseo urgente de ayudar.

lunes, 9 de febrero de 2015

09/02/2015 - La chica de amarillo

Nuestro Pan Diario
09/02/2015
La chica de amarillo
Por tanto, dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y serán una sola carne. —Génesis 2:24
La biblia en un año: Levítico 6–7Mateo 25:1-30

Fue su impermeable amarillo lo que me llamó la atención. Rápidamente, aumentó mi interés en esta bonita alumna de primer año, de cabello castaño y largo. Poco después, me armé de valor e interrumpí a Sue mientras ella caminaba leyendo una carta de un muchacho de su ciudad, y, torpemente, la invité a salir. Me sorprendí cuando me dijo que sí.

Más de cuatro décadas después, Sue y yo miramos atrás y nos reímos de nuestro primer encuentro en aquella universidad… y nos maravillamos de cómo Dios unió a esos dos jóvenes tímidos. A través de los años, hemos enfrentado innumerables crisis mientras formábamos nuestra familia. Nos esforzamos para criar cuatro hijos y nos dolió tremendamente cuando perdimos a nuestra hija Melissa. Problemas grandes y pequeños han probado nuestra fe, pero hemos permanecido juntos. Todo esto implicó un compromiso de parte de ambos y la gracia de Dios. Hoy nos regocijamos en los designios del Señor, expresados en Génesis 2:24: dejar a nuestros padres, unirnos como hombre y mujer, y convertirnos en una sola carne. Amamos este plan asombroso que nos ha dado una vida tan maravillosa juntos.

El diseño de Dios para el matrimonio es hermoso. Por eso, oramos para que las parejas casadas experimenten cuán maravilloso es disfrutar juntos de la vida con la bendición de la guía amorosa del Señor.
— DB

           El matrimonio florece en un clima de amor, honra y respeto.

domingo, 8 de febrero de 2015

08/02/2015 - ¿Quién es el jefe?

Nuestro Pan Diario
08/02/2015
¿Quién es el jefe?
… el pecado no se enseñoreará de vosotros; pues no estáis bajo la ley, sino bajo la gracia. —Romanos 6:14
La biblia en un año: Levítico 4–5Mateo 24:29-51

Un día, mientras mi esposa cuidaba a nuestros dos nietos pequeños, ellos empezaron a pelear por un juguete. De pronto, el menor (con tres años de diferencia) le ordenó a su hermano mayor: «¡Cameron, vete a tu cuarto!». Con los hombros encogidos por la reprimenda, el abatido hermano comenzaba obedientemente a escabullirse, cuando mi esposa dijo: «No tienes que irte a tu cuarto. ¡Nathan no es tu jefe!». Esa aclaración cambió todo, y Cam, sonriendo, volvió a sentarse a jugar.

Como seguidores de Cristo, la realidad de nuestra imperfección e inclinación al pecado puede adquirir una falsa autoridad como la del hermanito menor. El pecado nos aturde y amenaza con dominar nuestro corazón y mente, y el gozo desparece de nuestra comunión con el Salvador.
No obstante, por la muerte y la resurrección de Cristo, esa amenaza no existe. El pecado no tiene autoridad sobre nosotros. Por eso, Pablo escribió: «… el pecado no se enseñoreará de vosotros; pues no estáis bajo la ley, sino bajo la gracia» (Romanos 6:14).

Aunque nuestra situación angustiante es muy real, la gracia de Cristo nos capacita para vivir como le agrada a Dios y transmitirle al mundo su poder transformador. El pecado ya no es nuestro jefe. Ahora vivimos en la gracia y la presencia de Jesús, y su control sobre nuestra vida nos libera de la esclavitud al pecado.
— BC

           Dios nos busca en nuestro desasosiego, nos recibe en nuestro pecado y nos sostiene en nuestra fragilidad.

sábado, 7 de febrero de 2015

07/02/2015 - Fiesta de cumpleaños

Nuestro Pan Diario
07/02/2015
Fiesta de cumpleaños
En ti he sido sustentado desde el vientre […]; de ti será siempre mi alabanza. —Salmo 71:6
Lectura: Salmo 71:5-18
La biblia en un año: Levítico 1–3Mateo 24:1-28

Me encantaban los cumpleaños. Aún recuerdo estar delante de la puerta de mi casa, esperando con entusiasmo que mis amigos llegaran a mi fiesta cuando cumplí cinco años. No solo me alegraban los globos, los regalos y el pastel, ¡sino también que ya no seguía teniendo cuatro años!… estaba creciendo.

Sin embargo, a medida que pasa el tiempo, los cumpleaños han sido a veces más desalentadores que emocionantes. El año pasado, cuando cambié de década más que de años, mi esposa Martie me animó al recordarme que debía dar gracias por seguir cumpliendo años. Mencionó el Salmo 71, donde el salmista habla de la presencia de Dios durante toda su vida. Recuerda: «De las entrañas de mi madre tú fuiste el que me sacó» (v. 6); y proclama con gratitud: «Oh Dios, me enseñaste desde mi juventud, y hasta ahora he manifestado tus maravillas» (v. 17). Luego, cuando está más viejo, tiene el honor de anunciar: «[el] poder [de Dios] a la posteridad, y [su] potencia a todos los que han de venir» (v. 18). Dios bendijo al salmista con su presencia durante toda su vida.

Ahora, los cumpleaños me recuerdan la fidelidad de Señor. Además, ¡me acercan a la presencia de Aquel que ha estado conmigo todos estos años.
— JS

         Cuenta tus muchas bendiciones... ¡cumpleaños tras cumpleaños!

viernes, 6 de febrero de 2015

06/01/2015 - Bendiciones disfrazadas

Nuestro Pan Diario
06/01/2015
Bendiciones disfrazadas
¡Cuán grande es tu bondad, que has guardado para los que te temen!… —Salmo 31:19
La biblia en un año: Éxodo 39–40Mateo 23:23-39

Durante varias semanas después de que mi esposo tuvo un ataque al corazón, solíamos dar gracias a Dios por haberle permitido seguir con vida. Meses más tarde, aún seguían preguntándome cómo me sentía, y mi respuesta era a menudo muy simple: «Bendecida. Me siento bendecida».

No obstante, las bendiciones vienen en diferentes formas y tamaños. Aun cuando estamos haciendo todo lo que pensamos que Dios espera de nosotros, tal vez sigamos experimentando sufrimientos. A veces, nos sorprende que el Señor no responda como esperamos o que su tiempo no sea el que nosotros creemos oportuno.

Esto lo vemos en la vida de José. Desde una perspectiva humana, podríamos pensar que Dios se había olvidado de él, ya que, por más de una década, José experimentó sufrimientos. Lo arrojaron a un pozo, lo vendieron como esclavo, lo acusaron falsamente, lo encarcelaron de manera injusta. No obstante, al final, la fidelidad de Dios hacia él se manifestó ante todos al ponerlo como gobernante de Egipto y salvar a muchos de la hambruna (Génesis 37–46). C. S. Lewis escribió: «Cuando perdemos una bendición, otra suele ser dada en su lugar de la manera más inesperada».

Dios siempre tuvo su mano de bendición sobre José, como lo hace con todos los que confían en Él. «¡Cuán grande es tu bondad…!» (Salmo 31:19).
— CHK

       La verdadera felicidad consiste en saber que Dios es bueno.

jueves, 5 de febrero de 2015

05/02/2015 - Hábitos saludables

Nuestro Pan Diario
05/02/2015
Hábitos saludables
Confía en el Señor, y haz el bien… —Salmo 37:3
Lectura: Salmo 37:1-8
La biblia en un año: Éxodo 36–38Mateo 23:1-22

En la actualidad, se habla mucho sobre mejorar la salud desarrollando hábitos optimistas, ya sea al enfrentar un diagnóstico médico difícil o una pila de ropa para lavar. La Dra. Bárbara Fredrickson, profesora universitaria de psicología, señala que deberíamos tratar de realizar actividades que generen gozo, gratitud, amor y otros sentimientos positivos. No obstante, sabemos que no basta con tener un deseo generalizado de sentirnos bien, sino que también necesitamos una fuerte convicción de que existe una fuente de gozo, paz y amor de la cual podemos depender.

El Salmo 37:1-8 presenta acciones positivas que podemos tomar como un antídoto para el pesimismo y el desánimo. Considera estos reforzadores del ánimo: confiar en el Señor, hacer bien, morar en la tierra, alimentarse de la fidelidad (v. 3); deleitarse en el Señor (v. 4); encomendar tus caminos al Señor y confiar en Él (v. 5); descansar en el Señor, esperar pacientemente en Él, no afanarse (v. 7); dejar el enojo, abandonar la ira (v. 8).

Como estas directrices están vinculadas a la frase «en el Señor», son más que expresiones de deseo o sugerencias utópicas. Solo se vuelven posibles por causa de Jesús y la fortaleza que Él da.

Nuestra única fuente verdadera de optimismo es la redención que hay en Cristo. ¡Él es la razón de nuestra esperanza!
— DCM

         Cuando hay malas noticias, nuestra esperanza es la buena nueva de Jesús.

miércoles, 4 de febrero de 2015

04/02/2015 - Lo que no se compra

Nuestro Pan Diario
04/02/2015
Lo que no se compra
… en quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados según las riquezas de su gracia. —Efesios 1:7
La biblia en un año: Éxodo 34–35Mateo 22:23-46

«Hay algunas cosas que el dinero no puede comprar; pero, en estos tiempos, son pocas», afirma Michael Sandel, autor de Lo que el dinero no puede comprar. Una persona puede comprar un calabozo mejor por 90 dólares la noche cuando está presa; el derecho a cazar un rinoceronte negro en peligro de extinción, por 250.000 dólares; o el número de teléfono móvil de su médico, por 1.500 dólares. Parece ser que «casi todo está a la venta».

Pero lo que el dinero no puede comprar es la redención: la libertad del dominio del pecado. Cuando Pablo empezó a escribir sobre la naturaleza inestimable del plan de Dios para la salvación por medio de Cristo, su corazón irrumpió en alabanza: «en quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados según las riquezas de su gracia, que hizo sobreabundar para con nosotros…» (Efesios 1:7-8).

La muerte de Jesús en la cruz fue el alto costo que se pagó para liberarnos del pecado. Y solamente Él podía pagar ese precio, porque es el perfecto Hijo de Dios. La respuesta natural ante una gracia tan generosa, pero también costosa, es una alabanza espontánea y de corazón, y una consagración al Dios que nos compró por medio de Jesucristo (1:13-14).

¡Alabado sea nuestro Dios amoroso; Él vino para darnos libertad!
— MW

          Solo la muerte de Jesús pudo comprar nuestra libertad.